Es increíble la importancia en mi historia que tiene este cerro...ahora que comienzo a escribir lo analizo y es muy marcador. Es mi primer post y parto hablando de este cerro. Tal vez porque vengo recién bajando y porque aún están frescas en la memoria todas las experiencias vividas en estos cinco días allá arriba.
El Plomo..el cerro que marcó mi inicio en esto del montañismo, aún recuerdo aquella primera experiencia hace tres años atrás, eramos un grupo de amigos con casi nada de conocimientos de montaña, con casi o nada de equipo, pero si con muchas ganas de estar en contacto con la naturaleza y de disfrutar y admirarnos de la creación de Dios. Nada importó, ni siquiera la cero preparación física que tenía, desde que me invitaron sentí la necesidad de estar allá, y cuando me lo mostraron un día subiendo por la Kennedy, lo encontré precioso y no me pareció tan amenazador ni tan imponente...lo que hace la inexperiencia...
La época elegida para subir era muy especial, entre Navidad y Año Nuevo, se supone que es la mejor época porque el clima es más estable.
Ese 25 de Diciembre de 2005 fue muy diferente a los anteriores, preparando mochila, intentando llevar todo lo que consideraba necesario y el peso de la mochila después me demostró que no sólo llevaba lo necesario si no que un poco más. Pero, insisto, nada importaba.
26 de Diciembre del 2005 el viaje y la aventura comenzaban. Mucha gente había en el cerro en esas fechas, un gran grupo de Montañismo de la U. Católica; quién diría que tiempo después formaría parte de ese grupo...fue mi primera vez ahí y aunque no logramos hacer cumbre, probablemente debido a nuestra inexperiencia, porque salimos demasiado tarde en un cerro que suele cerrarse a la 1 de la tarde. Pero, nuevamente lo digo, no importaba...aprendimos tanto, aprendí tanto, pero lo principal de aquella aventura fue el amor que adquirí por la montaña, a partir de ese momento se inicia mi historia de "montañista", una historia corta, pero intensa, corta porque ha pasado poquísimo tiempo desde aquel primer encuentro, desde aquel primer acercamiento al mundo de allá arriba; intensa porque a pesar del poco tiempo he hecho muchas cosas, se ha acumulado muchísima experiencia y lo principal de todo he creado lazos de amistad y compañerismo muy importantes con mucha gente. Finalmente creo que eso es lo mas importante, la amistad que genera este deporte no tiene comparación con ningún otro y todo eso lo empezé a aprender en ese cerro
El Plomo..el cerro que marcó mi inicio en esto del montañismo, aún recuerdo aquella primera experiencia hace tres años atrás, eramos un grupo de amigos con casi nada de conocimientos de montaña, con casi o nada de equipo, pero si con muchas ganas de estar en contacto con la naturaleza y de disfrutar y admirarnos de la creación de Dios. Nada importó, ni siquiera la cero preparación física que tenía, desde que me invitaron sentí la necesidad de estar allá, y cuando me lo mostraron un día subiendo por la Kennedy, lo encontré precioso y no me pareció tan amenazador ni tan imponente...lo que hace la inexperiencia...
La época elegida para subir era muy especial, entre Navidad y Año Nuevo, se supone que es la mejor época porque el clima es más estable.
Ese 25 de Diciembre de 2005 fue muy diferente a los anteriores, preparando mochila, intentando llevar todo lo que consideraba necesario y el peso de la mochila después me demostró que no sólo llevaba lo necesario si no que un poco más. Pero, insisto, nada importaba.
26 de Diciembre del 2005 el viaje y la aventura comenzaban. Mucha gente había en el cerro en esas fechas, un gran grupo de Montañismo de la U. Católica; quién diría que tiempo después formaría parte de ese grupo...fue mi primera vez ahí y aunque no logramos hacer cumbre, probablemente debido a nuestra inexperiencia, porque salimos demasiado tarde en un cerro que suele cerrarse a la 1 de la tarde. Pero, nuevamente lo digo, no importaba...aprendimos tanto, aprendí tanto, pero lo principal de aquella aventura fue el amor que adquirí por la montaña, a partir de ese momento se inicia mi historia de "montañista", una historia corta, pero intensa, corta porque ha pasado poquísimo tiempo desde aquel primer encuentro, desde aquel primer acercamiento al mundo de allá arriba; intensa porque a pesar del poco tiempo he hecho muchas cosas, se ha acumulado muchísima experiencia y lo principal de todo he creado lazos de amistad y compañerismo muy importantes con mucha gente. Finalmente creo que eso es lo mas importante, la amistad que genera este deporte no tiene comparación con ningún otro y todo eso lo empezé a aprender en ese cerro
El Plomo... un antes y un después de él en mi vida. Asi de importante, así de marcador, un cerro al que volveré siempre...un cerro que estoy segura seguirá marcando mi vida.
